Miedo

Nuestro miedo más profundo no es no estar a la altura. Nuestro miedo más profundo es que somos muy poderosos. Es nuestra luz, no nuestra oscuridad lo que más nos asusta.

El disminuirse no le sirve al mundo. No hay sabiduría en encogerse...para que otros no se sientan inseguros cerca de uno.

Todos nacimos para brillar, como todos los niños.

No está en algunos de nosotros, está en todo el mundo. Y al dejar que nuestra propia luz brille...inconscientemente permitimos que otros hagan lo mismo.

Al ser liberados de nuestro propio miedo...nuestra presencia automáticamente libera a otros.

Cuando crecí me di cuenta que no le tengo miedo a la obscuridad si no a mi mente. No sé si es porque me la pasé mirando películas de terror toda mi vida, ya que siempre imaginé que me aparecía Jason con su machetito y me mataba con algún método poco usual. Ó que la inseguridad que nos rodea en este país hace que tengamos mucho miedo de andar solos por ahí. No lo sé, quizás ambas.

Me gusta la obscuridad, en estos momentos está todo completamente apagado y la única luz que se ve es la del monitor. No me gusta andar con mucha luz, tampoco me gusta cuando hay mucho sol. No es que sea un vampiro ni nada de eso, pero no me gusta mucho la luz.

Mi mente me juega en contra, sobretodo cuando escucho ruidos que me hacen imaginarme cualquier cosa. ¿Nunca les pasó a ustedes que se sintieron perseguidos mientras iban caminando por la calle? Bueno, eso es normal en mí, para mí que siempre hay alguien vigilándonos desde algún lado. Así que, mucho cuidado con lo que andan haciendo por ahí.