jueves, 17 de abril de 2008

Precios bajos, siempre.

Mientras caminaba por la calle pasó en una carreta un señor gritando: ¡Cambio 30 huevos por una batería vieja!

Me quedé pensando ¿Hace cuánto que escucho esa frasecita de los carreteleros? Hace tantos años ya y siguen con los 30 huevos por la batería.

Es lo único que puedo estar seguro de que se mantiene en este país, mientras todo aumenta y se va hacia las nubes, los carreteleros mantienen el precio de los huevos por una batería. Son unos grossos, definitivamente.

¿Será porque son malos comerciantes, porque no se enteran de la situación actual o porque el cantito se les pegó en la mente y no se lo pueden sacar?

Que loco. ¿No?

1 comentario:

Malena dijo...

O será que los huevos y las baterías viejas aumentaron proporcionalmente, entonces sigue siendo un gran negocio.